En el Portal de Educastur se alberga una revista electrónica, ABAREQUE, una revista con una historia y unos objetivos que queremos compartir con nuestros compañeros y compañeras de PINAKES.
Esta gente loca y locuaz de las bibliotecas escolares está haciendo desde hace años que me guste comenzar las historias con un…“Érase una vez…” y, como aquí estamos entre amigos y amigas, ahí va una pequeña historia:
Érase una vez una idea, una idea que, por supuesto, no merecía estar sola, una idea que, como todas las buenas ideas, partía de dos condicionantes: 1) por sí sola parecía estar loca y 2) acompañada y compartida adquiría una brillantez y una cordura que le hacían más que respetable. Pero lo bueno de esa idea fue lo oportuno de su llegada, pues lo hizo en el momento en el que esas condiciones se iban a dar. Y es que, como ya sabréis, en Asturias, tal y como en otras partes, las bibliotecas comienzan a tomar más fuerza cuando la administración correspondiente recoge el guante de tantos y tantos profesionales que se empeñaban (ya digo que éstas son personas muy pero que muy persuasivas) en recuperar ese espacio más allá del rincón físico que en muchos centros ocupaban y en darles aire fresco en forma de actividades dinamizadoras, tanto de de la propia vida del centro como de aspectos relacionados con el currículum de diferentes áreas, y que, por tanto, reivindicaban con sus acciones una atención, un mimo, un empujón. Pues bien, una
mañana del mes de noviembre de 2001, en el Centro del Profesorado y Recursos de Oviedo apareció una maestra, a la que yo no conocía y, al igual que el conejo de Alicia en el País de las Maravillas repetía que llegaba tarde, repetía: “tengo una idea, la quiero compartir, necesito ayuda” (y no os podéis imaginar lo insistente que era). Tal era así que en dos horas, más o menos, las cuatro personas que allí nos
encontrábamos teníamos muy claro en qué se iba a convertir. Acababa de nacer Abareque. En aquel momento, y tal y como rezaba aquel ya lejano nº1, pretendía ser un espacio abierto, un lugar de encuentro y de intercambio de opiniones y experiencias relacionadas con el mundo de las bibliotecas escolares, sus expectativas actuales, sus usos y sus posibilidades, tanto de existencia como de desarrollo. Queríamos ser un equipo, un equipo en constante apertura, sin límite de edades, abierto a nuevas ideas. Se quería, por tanto, que esta experiencia se convirtiera en propiedad de todas aquellas personas que creyesen que merecía la pena desarrollarla. Digno es mencionar quienes estábamos al pie de aquella primera aventura, os describo la tripulación: como ya os dije, la idea original fue de Rosa Piquín, y en el CPR la impulsaron junto con ella y la colaboración externa imprescindible de Ana Rey (ideas variadas y soporte técnico exquisito) tres personas asesoras: Herminia Iglesias, Mª José Ríos y Roberto García.
¿Por qué Abareque? Como podéis ver, la definición insinúa muchas cosas: <<arte de pesca>>, <<red de malla fina empleada para pescar que, por su propio diseño, atrapa de manera selectiva durante la navegación>>. Y os digo que, tal parecía, que cada vez que hacíamos un número nos sentíamos auténticos pescadores, pues allá donde llegábamos, o sacábamos fotos de la biblioteca, o invitábamos a aportar una novedad o una recomendación, o simplemente el guiño de decir: “qué maravilla lo que estás haciendo, ¿cómo no te animas y lo “colgamos en Abareque….”, era como navegar en un mar de experiencias que sentíamos que rescatábamos para compartirlas con la comunidad educativa que, a la par que se nutría de ellas, también las aportaba para su consumo. Se intentaba, además, que todas y cada una de las entradas tuvieran el mismo referente temático, lo que significaba un esfuerzo añadido.
Esta aventura duró tal y como os la cuento hasta marzo de 2004 donde, tras seis números, llegaron momentos que por difíciles y en ocasiones tristes que no merece la pena comentar en este espacio (es que esta gente de bibliotecas escolares me enseñó a dejar intrigada a la audiencia cuando se les cuenta un cuento... ya sabéis lo de la animación lectora y todo eso...), y que supusieron un parón.
Pero ya sabéis que, en ocasiones, un respiro hace que se tome impulso; en el curso 2005/06 no podía continuar el equipo como tal, y además la revista desbordaba, tanto por contenidos a manejar como por soporte con el que hacerlo; podría decirse que exigía trabajar en ella casi con exclusividad y, aunque las ayudas ofrecidas eran muchas, había que recomponer tanto la idea como el equipo. Así, en ese año, Abareque toma la forma actual y añade el apartado de formación pasando a ser denominada de los CPRs de Asturias, ya que en cada uno de ellos existe el compromiso de aportar una persona al consejo de redacción. En estos momentos se está formando igualmente el Consejo Asesor donde, como podréis imaginar, tendrán cabida personas de reconocido prestigio en la labor de desarrollo y dinamización de las bibliotecas escolares en Asturias (sí sí..., la de la idea original también vuelve a estar por ahí, y con más fuerza, si cabe... ya os dije que es perseverante), es decir, la idea original sigue viva y se sigue queriendo que sea propiedad de todas aquellas personas que crean que merece la pena desarrollarla.
Y hasta aquí podría leer (pasado, presente, nacimiento y desarrollo... puedo dejar que pongáis el final..), si no fuera porque también quiero comentaros el futuro que imagino para este cuento de nunca acabar, ya que si tenemos en cuenta (entre otras muchas cosas)que la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Educación exige de las administraciones públicas competentes el desarrollo normativo necesario para la implantación de las Bibliotecas Escolares y, por tanto, habrá que facilitar la ordenación y organización de los medios existentes, y que en esta comunidad llevamos ya seis años con el Plan para el desarrollo de las Bibliotecas Escolares y, actualmente, son más de doscientos los centros que están desarrollando Proyectos de Bibliotecas Escolares, con Seminarios o Grupos de Trabajo vinculados a los CPRs, y diez centros públicos asturianos han recibido Premios Nacionales de Bibliotecas Escolares-MEC por sus proyectos de Dinamización e Infraestructuras. Podemos decir que el futuro tiene una doble vía: avanzar hacia una concepción (ya muy extendida por otra parte) de la biblioteca escolar como un Centro de Recursos de Enseñanza- Aprendizaje, y hacia el establecimiento de una red articulada de bibliotecas escolares del Principado de Asturias que permita el funcionamiento cooperativo entre bibliotecas.
¿Queda mucho? Pues sí, pero nos anima a los abarequeros y abarequeras el hecho de que esas ideas estaban presentes en aquellos primeros números, y pensamos, por tanto, que leer, investigar, compartir y formarse siguen siendo pilares básicos de unión para la consecución de estos objetivos de avance, y que la comunidad los irá construyendo a medida que sientan apoyos más y más firmes.
Así que amigos y amigas de PINAKES, no sé si Abareque seguirá con este formato, con otro o se convertirá en una plataforma distinta, pero puedo aseguraros que aquella idea del principio sigue intacta y seguirá desarrollándose, y nos sigue haciendo mucha ilusión ver que iniciativas como la vuestra se suman a compartir experiencias e información relacionadas con las bibliotecas escolares y su desarrollo.